CONVIERTETE EN

un máster del asador

Bien que los conozco, sobrinos y sé que son bien amantes del asador y hasta consideran el fino arte de asar carne como uno de las Siete Maravillas del Mundo, ¡porque no es tan fácil!; es todo un ritual para conseguir el corte jugoso y delicioso que tanto esperamos. Desde cómo prender el carbón hasta la forma en cómo presentas tu platillo, ¡la carne asada es todo un arte! 

Tanto, que hoy nos quisimos ver buena onda y les vamos a compartir cuáles son nuestros más profundos secretos al asador. ¡Así que saca tu libreta y apunta! 

Antes que nada, debemos tener una parrilla limpiecita y la mejor manera para lograrlo es usando una cebollita partida a la mitad y pa’ agregarle un aroma más sabroso a nuestro asado, te recomendamos tirar la misma cebolla al carbón. 

Para aquellos que apenas se me andan iniciando en esto de la prendida del asador, no se me preocupen, aquí los ayudamos. Ármate una torrecita de carbón, los pedazos más grandes las pones como base en forma de cuadrado, los medianos los vas acomodando arriba de la base dejando un espacio como chimenea. Toma una servilleta y báñala en aceite vegetal, déjala dentro de la torre de carbón ¡y échele la lumbrita! 

¿Cómo saber si la lumbre ya está lista? Bien fácil, acerca tu mano a la parrilla a una distancia de unos 5 centímetros, si soportas 10 segundos encima de la lumbre sin quemarte, tu asador ya está listo pa’ asar tu corte.  

De seguro se andan preguntando, ¿qué onda con este compa, no va a marinar la carne? Los expertos del asador nos dicen que la mejor manera para marinar un corte es agregarle la sal de grano grueso después de dar la primera vuelta en el asador, recomiendan hacerlo de esta manera, ya que así la sal no absorbe los jugos y no queda la carne seca.

La paciencia, es una de las mejores cualidades que hay que tener para conseguir un corte en su mero punto, te recomendamos dejar el corte al asador alrededor de 5 a 6 minutos por cada lado, entre menos vueltas que le des mejor. 

Por nada del mundo, vayas a pinchar la carne al momento de voltearla, esto hace que el jugo se salga del corte y no llegue al punto deseado, para voltear la carne el mejor instrumento son unas pinzas, no uses el trinche, no seas… gacho. 

Ya que hayas sacado el corte, dale unos minutos para que repose, por mientras ármate un guacamolito con su pico de gallo, agarra tu salsa Welita Chila favorita y empieza a calentar las tortillas, agarra una cheve y disfruta de tu corte. 

Esperamos que pongas en práctica estos secretos pa’ que tu próxima carnita asada sea todo un éxito e impresiones a todos tus compas.